Dos años no parece ser un período muy extenso para el definitivo arribo del automóvil del futuro. En simetría con el trabajo de compañías del sector como Ford, que desde hace largo tiempo profundiza la conectividad de sus modelos de la mano de Microsoft, o de las investigaciones en este campo a cargo de Volvo, que recientemente rubricó un acuerdo con el especialista Ericsson para introducir la experiencia web en la conducción; la surcoreana Hyundai anunció que hacia el año 2015 prevé lanzar al mercado un modelo plenamente integrado a los beneficios de los teléfonos inteligentes.
En específico, este prototipo toma provecho de la tecnología Near Field Comunication (mejor conocida por sus siglas, NFC), un sistema de comunicación inalámbrica de corto alcance el cual incorporan algunos dispositivos de alta gama, hasta el momento utilizado principalmente para realizar pagos a través del móvil. ¿Cómo funciona? Pues es sencillo: el usuario acerca el equipo a una terminal y, en la proximidad, NFC hace su trabajo.
Hyundai ha vislumbrado en esta tecnología una herramienta que también puede ser útil para los conductores. De este modo, el smartphone reemplazará a las llaves tradicionales y permitirá, con sólo acercarlo a la puerta, acceder al interior del vehículo. Con epicentro en una pantalla de 7 pulgadas ubicada en la consola central, dentro del habitáculo el móvil será capaz de activar y controlar diversas funciones como el sistema de navegación, los contactos o la música, además de establecer perfiles con las preferencias específicas de cada conductor. La firma surcoreana informa que el vehículo conectado dispondrá de una bandeja la cual recargará la batería del móvil sin intermediar cables.
Ford, Volvo y Hyundai son solamente algunos ejemplos de compañías que trabajan en pos de una integración de industrias -la automotriz y la tecnológica- cuya convergencia es un hecho cada vez más patente.
Via http://www.eldiario24.com
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